domingo, 5 de abril de 2009

La travesia de los tres rios

Y vuelta a comenzar .....

Casi un año después de nuestro primer intento frustrado de navegar por el Ebro hasta el mar, volvemos ha intentarlo, pero esta vez con un plan más ambicioso:

Iniciar la travesía en la ciudad aragonesa de Fraga hasta el Delta del Ebro. Navegando por los tramos finales de los ríos Cinca y Segre, para continuar por el Ebro saltando las presas de Ribarroja y Flix, y los axuts de Ascó y Xerta.

Ficha técnica:

Nombre en clave de la “misión”: La travesía de los tres ríos
Los intrépidos participantes:
  • Oscar Mondejar, (El homeless)
  • Toni Plaia, ( Estàs rallat?, que nooo)
  • Joan Perona, (El mito caído)
Distancia aproximada: 193 km.
Duración: 5 dias




1ª Etapa: Fraga - Mequinenza
Ante todo, antes de comenzar el relato de esta primera etapa, tengo que agradecer a nuestro compañero David la ayuda prestada. Gracias a el pudimos disponer de nuestro coche aparcado en Riumar al termino de nuestro viaje. Gracias.------------------------------------------------------------------------
Nos despertamos esa mañana con la incerteza de la previsión meteorológica. Definitivamente el "veranillo" de las ultimas semanas había concluido y todos los pronósticos anunciaban lluvia para los próximo días.
Mirando al cielo preparamos los kayaks para la partida. Las ganas de comenzar a remar hicieron de las tareas de desmontar la tienda y acomodarla junto al resto del equipaje en el interior de nuestras naves, un visto y no visto.
!!!!!! Y POR FIN EN EL AGUA ¡¡¡¡¡ Iniciamos nuestra singladura por el río Cinca intentando sortear los primeros rápidos por las zonas que habíamos inspeccionado el día anterior. Rápidos que, aunque no se pueden considerar como difíciles, nos hicieron aplicarnos para controlar los kayaks cargados.
Pronto llegaron los vuelcos, o mejor dicho el vuelco. Un fallo de calculo y la proa de mi kayak contra el pilar del puente........ Afortunadamente el agua no estaba demasiado fría y las bolsas estancas funcionaron a la perfección.
Volcadas a aparte, este primer tramonos sorprendió a los tres. A pesar de la proximidad de la carretera y de varias poblaciones, por momentos el río nos descubría rincones solitarios y silenciosos donde pudimos disfrutar de las evoluciones de las aves que nos sobrevolaban o pescaban en el río.
Envelesados por el entorno, en poco menos de dos horas, llegamos a la confluencia del Cinca con el Segre, cumpliendo así el primer "objetivo" del viaje. A partir de la confluencia de los dos ríos el paisaje cambia notablemente: El Segre se ensancha considerablemente y la corriente, cada vez más difusa, se pierde totalmente al poco de sobrepasar la población de la Granja d'Escarp.
Llegamos a Mequinenza bajo una insistente lluvia. Después de comer alguna cosa, y de comprar provisiones para el siguiente tramo de río, decidimos terminar la jornada aquí y buscar un rincón donde montar la tienda.



Tras unas pequeñas "gestiones" con la autoridad local, conseguimos autorización para instalarnos en el parking del club náutico. Lo que nos permitio montar nuestro campamento a resguardo de la lluvia, que ya no pararía durante el resto del día y casi toda la noche.